El 14 de septiembre, en su discurso sobre el estado de la Unión, la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, ha señalado y explicado algunas iniciativas que la Comisión tiene previsto emprender el próximo año. Entre ellas, ha propuesto que el 2023 sea el Año Europeo de la Formación y sobre todo de la Formación Continua.
Durante su discurso, la presidenta ha indicado que nos encontramos en un contexto de escasez de recursos humanos y que «por lo tanto, tenemos que invertir mucho más en formación y formación continua». Las políticas de reskilling y upskilling van a ser fundamentales para adaptar el tejido empresarial europeo.
En este proceso, la Unión Europea quiere colaborar estrechamente con las empresas, «porque ellas son las que mejor saben qué profesionales necesitan hoy y qué profesionales necesitarán mañana». Pero también es consciente de que es necesario incluir a las personas trabajadoras en este proceso y que va a ser necesario «conciliar mejor estas necesidades con los objetivos y deseos de los propios solicitantes de empleo en lo que respecta a su trayectoria profesional».